En esa constante búsqueda por las bibliotecas digitales, de noticias, apuntes y asuntos que estén relacionados con nuestra Villa, de vez en cuando nos encontramos con cosas verdaderamente curiosas y llamativas.
En esta ocasión, en primer lugar encontré una denuncia pública referente a algo sucedido en Tembleque en 1.821, y de la que trataremos en la próxima entrega, pero la siguiente entrada que aparecía datada en el 1.823, pero recogiendo un documento de 1.820 me dejó perplejo.
Después de meditarlo y aun no estando relacionada directamente con nuestra Villa, consideré que la una tenía que ver con la otra, la del 21 con la del 20, y por ello me decidí a publicarla.
Puedo aseguraros que merece la pena su lectura y que tras la misma, no podemos por menos que estar agradecidos de haber nacido en el siglo XX.
Con los ojos del siglo XXI, leyendo entre líneas y haciendo algo de memoria sobre nuestra pasada historia, es un documento demoledor.
Antes de iniciar su lectura y al objeto de entender el contexto en el que fue redactado el Reglamento Secreto, un breve apunte histórico de lo que fue conocido como
El Trienio Liberal (1820-1823)
Finalmente, un pronunciamiento liberal terminó por triunfar. Poniéndose al frente de un ejército que en Cabezas de San Juan (Cádiz) estaba acantonado, el teniente coronel Riego se puso al frente de este contingente y proclamó la Constitución de 1812. Tras diferentes avatares la insurrección se generalizó. El 9 de marzo de 1820, Fernando VII, atemorizado, juró la Constitución de 1812. (http://www.historiasiglo20.org/HE/9c-2-riego.htm.)
Teniente Coronel Rafael de Riego
Por primera vez, se aplicaba la Constitución de 1812 en una situación de paz y con el monarca en el país. Fernando VII, convencido absolutista, trató de obstruir desde un principio la labor de los gobiernos liberales y el normal funcionamiento constitucional. (http://www.historiasiglo20.org/HE/9c-2-cortestrienioliberal.htm.)
Esta actitud del rey va a provocar una fractura política que se extenderá durante décadas: la escisión de los liberales.
Por un lado, los “doceañistas” pretenderán modificar la Constitución buscando una transacción con el Rey. Para ello, defendieron la concesión de más poder al monarca y la creación de una segunda cámara reservada a las clases más altas.
Por otro lado, los “veinteañistas” pedían simplemente la aplicación estricta de la Constitución de 1812. Conocidos también como los exaltados.
La división de los liberales introdujo una gran inestabilidad política durante el Trienio.Los liberales en el poder durante el Trienio van a aplicar una política claramente anticlerical: expulsión de los jesuitas, abolición del diezmo, supresión de la Inquisición, desamortización de los bienes de las órdenes religiosas... Todas estas medidas trataban de debilitar a una poderosísima institución opuesta al desmantelamiento del Antiguo Régimen. El enfrentamiento con la Iglesia será un elemento clave de la revolución liberal española.
Os dejo con ese Reglamento Secreto del que os aseguro que no podéis ni imaginar su macabro contenido.
2 comentarios:
En primer lugar, dar la enhorabuena a quien corresponda por este blog. Me parece de un gran mérito la labor de búsqueda de información y documentación sobre nuestro pueblo que se esta realizando.
Una vez dicho esto, solo comentar que por desgracia esta parte de la historia de España - la que media entre la guerra de la independencia y la guerra civil - es prácticamente desconocida por la inmensa mayoría de la gente, y digo por desgracia porque en esta época es cuando se perfilan la mayor parte de los problemas que venimos arrastrando hasta la actualidad.
En fin, para quien quiera conocer algo más sobre esta época, de forma más amena que a través de un libro de texto, recomiendo dos de los episodios nacionales de Perez Galdos; "El 7 de Julio" y "Los cien mil hijos de San Luis".
Y para terminar, en cuanto al texto, a mi eso de "reglamento secreto", y de que se le perdiera a un vocal de cortes, me suena más a propaganda absolutista que a otra cosa, lo cual no quita para que sea muy interesante en cuanto prueba del nivel de enfrentamiento que existía dentro de la sociedad española en ese momento, entre liberales y absolutistas, y que terminó en el baño de sangre de 1823.
Un saludo!!!!
Amigo Carlos:
Gracias por tu comentario, para los que dedicamos algo de nuestro tiempo a alimentar estas páginas siempre es una satisfacción ver que hay gente que, también, dedica su tiempo a leerlo y si además le satisface mucho mejor.
Estoy totalmente de acuerdo con tus comentarios y sobretodo con lo bueno que sería si conocieramos, de verdad, nuestra historia y no sólo las partes que nos interesan o que otros quieren que nos interesen. La frase de "la historia se repite" por desgracia es bien cierta y si la conociéramos nos evitaríamos muchos problemas.
De nuevo, GRACIAS y esperamos seguir contando con tus comentarios.
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